miércoles, 22 de mayo de 2013

¿Qué nos deparará el segundo tiempo?


Al ecuador de este peculiar partido se ha llegado con un insulso juego y un empate a nada; ambos equipos han amagado mucho pero no han dado en el blanco. Ha fallado en exceso el favorito, que logró el apoyo de los aficionados hace un par de años y tampoco ha estado muy acertado el combinado que partía en clara desventaja tras los últimos resultados. Así pues, toque, toque y toque sin alcanzar los objetivos previstos al inicio de la campaña. Por esa razón, el público se está impacientando con independencia de los colores que defiende. Unos, porque no están viendo reflejado sobre el terreno aquello que les prometieron por activa y por pasiva para que depositaran su confianza en ese equipo. Otros, porque no están dando batalla y dejan entrever una acuciante falta de medios aunque intenten, eso sí, ser competitivos. Nadie recuerda una jugada espectacular y sí, mucho fuego de artificio
El trío de entrenadores, hasta el momento, no está acertando con los planteamientos y, en la mayoría de los casos, da la sensación de que no tienen un patrón de juego definido. No solo se trata de conseguir metas sino que quien paga exige que se haga desplegando una propuesta práctica y bonita. No en vano, los espectadores, al fin y al cabo, son quienes eligen a los técnicos. Es lo único que les queda al margen de la protesta desde la grada.
Falta por disputar toda la segunda parte y hay mucha tela que cortar, Sin embargo, o cambia la actitud del equipo que actualmente lidera la clasificación o al final del partido la bronca será mayúscula y puede que buena parte cambie el color de su bufanda.
No está todo decidido y aún se puede remontar, pero se ha perdido un tiempo muy importante y lo peor es que el líder del equipo está desaparecido ante los cantos de sirenas que lo sitúan en otras lides –se habla, incluso, de un conjunto con aspiración de ganar el campeonato regional, que, hasta la fecha, tiene un único vencedor, si bien, cada vez más cuestionado-. Sin ese líder, sus restantes compañeros no saben o no pueden asumir el timón. Él acapara todas las miradas y alrededor de su figura se confeccionó una amplia plantilla. No se trata de mirar al banquillo y cambiar un jugador por otro. Más bien sería necesario que el mediático y carismático líder –aclamado en su día por las masas- ofrezca su mejor versión y dedique a su equipo actual todo su esfuerzo, sin distracciones. El próximo 30 de mayo se podrá medir si cuenta aún con respaldo mayoritario cuando pise junto a sus compañeros el romero y la juncia de las calles del centro. De momento, estos días se ha hablado de la Feria y eso, cuando queda todavía un año, no gusta demasiado a la afición. El público esperaba y espera mucho de él y aunque está jugando con clara superioridad numérica en su estadio, ya se sabe que en la política –perdón, el fútbol- no hay rival pequeño. En cualquier momento te pueden meter un gol y ganar el partido o… las elecciones. 

miércoles, 15 de mayo de 2013

¿Quieren reeditar la alternancia de Cánovas y Sagasta?

Las dos últimas encuestas sobre intención de voto publicadas en El País y El Mundo muestran una estrepitosa caída del PP y un continuado descenso del PSOE. Más allá de las interesadas interpretaciones, como siempre que aparece un sondeo de opinión, casi todos coincidimos en las dos conclusiones más importantes que se pueden extraer de esos estudios: la acuciante pérdida de protagonismo del bipartidismo y el auge de IU y UPyD. Sin embargo, los líderes populares y socialistas han hecho caso omiso a este serio aviso y siguen mirando hacia otro lado. Los dirigentes de una y otra formación prefieren poner el acento en los deméritos del oponente en lugar de reflexionar seriamente a la luz de estos datos y hacer autocrítica. ¿Aún se preguntan por qué los políticos se convierten en uno de los temas que más preocupan a los ciudadanos?
Qué quieren que les diga! Lejos de circunloquios y eufemismos, me imagino con frecuencia una parodia surrealista con los responsables de los principales partidos como protagonistas. Una absurda conversación entre dos interlocutores que saben que no tienen el foco de las cámaras apuntando hacia ellos. Un diálogo propio de niños en un patio de colegios con el tan cacareado " y tú, más". Una escena que podría describirse de esta manera:
-Mariano, vaya varapalo te han dado en las encuestas. Tantos recortes tienen estas cosas...
-Bueno, no es para tanto...
-Qué no lo es? Si has perdido más de 12 puntos en menos de un año!
-Bueno, pero... umm...vosotros también bajáis, así que...
-Pero no es lo mismo...
-Aun así, seguimos por encima...
-Sí, umm... pero por poco tiempo porque la gente no te quiere
-Pues anda que a ti... ¡ni los tuyos te apoyan!
-Pero sacas menos nota que yo...
-Sí pero soy más alto...
(un rato más tarde)
-Oye, hablemos de cosas más importantes... Vas a ir al partido del viernes?
-Claro, a ver si ganamos
-Eso a pesar de "Mou". Ése sí que me preocupa...
Esté o no en riesgo el bipartidismo, ya hay voces que alertan de la conveniencia de dos grandes formaciones para mantener el equilibrio democrático. ¿Será que de verdad están viendo las orejas al lobo?
Mientras consideren que cuanto peor vaya el adversario, mejor para ellos aunque sea en detrimento del interés general; mientras no castiguen con firmeza a quienes se sirven y se lucran con la política; mientras incumplan de manera sistemática los programas electorales y mientras nos traten como meros espectadores, la sociedad se irá alejando cada vez más de sus dirigentes y sus instituciones públicas.
Sin embargo, si malo es que a los aficionados no les guste el equipo ni los jugadores y tampoco el estilo propuesto para conseguir la meta, peor aún es que piensen que no hay banquillo.

viernes, 10 de mayo de 2013

Una fecha desafortunada


Debo admitir que desconozco el motivo de la elección del 11 de mayo para la salida extraordinaria de nuestra patrona. No solo pongo el foco sobre el Arzobispado porque considero que desde los medios de comunicación tampoco se ha prestado tanto interés al acontecimiento como al magno viacrucis de febrero -aunque ambas citas respondan al año de la Fe que celebra la Iglesia en este 2013-. ¿Por qué esta fecha? Se enmarca esta procesión en plena vorágine rociera y a escasos días de la salida de las hermandades de la capital hacia la aldea almonteña. ¿Acaso no se conocía qué día se celebra Pentecostés? ¿Será porque mayo es el mes dedicado a María? Demos por bueno este razonamiento, pero ¿por qué un sábado? Ítem más, ¿no congregaría más devotos, cofrades y público en general un rosario vespertino? Tengo la sensación de que no existe el ambiente deseado que la ocasión merece. Esta semana, en los medios, se ha hablado de la composición del cortejo y poco más. Se le ha dado el mismo espacio que a la presentación de las portadas del Corpus. Incluso la recuperación de la salida de la custodia del Salvador sobre el magnífico paso de plata de Pasión –el próximo 3 de junio- ha tenido más eco. En este sentido, me atrevería a decir que muchos sevillanos estan desorientados con esta procesión y que buena parte de la ciudad se sorprenderá mañana si a esa hora transita por el entorno de la Catedral por la presencia del característico palio de tumbilla. En definitiva, un acto que ya quedó ensombrecido cuando se anunció en rueda de prensa junto al resto de actividades que conmemoran el año de la Fe y que no ha suscitado más interés conforme se acercaba la fecha. Desde luego, si en los pueblos del Aljarafe, donde existe bastante devoción por la Virgen de los Reyes, no llegado por un motivo u otro esta convocatoria, el ambiente puede ser más frío que de costumbre. Quizá haya faltado una mayor intervención por parte del Consejo de Hermandades para “avivar” –digámoslo así- todo lo concerniente a la procesión. Por lo menos, no se espera lluvia; de lo contrario más de uno querría desaparecer.